La comida salada se caracteriza por el uso predominante de sal u otros condimentos salinos que realzan su sabor y son esenciales para la conservación de ciertos alimentos. Desde tiempos antiguos, la sal ha sido uno de los ingredientes más valorados y utilizados por su capacidad para realzar el sabor de los alimentos y preservarlos.

Tipos de alimentos salados

1. Snacks salados: Los aperitivos o «snacks» salados incluyen productos como papas fritas, frutos secos salados, galletas saladas. Estos alimentos son populares porque combinan la sal con otros ingredientes que aportan textura y sabor, lo que los convierte en un acompañante perfecto para bebidas como refrescos, cervezas y cócteles.
2. Carnes curadas y embutidos: Muchos productos cárnicos como el jamón, el salchichón y el chorizo son curados con sal o salmuera. El proceso de curado con sal no solo les da un sabor característico, sino que también les permite conservarse durante más tiempo sin necesidad de refrigeración.
3. Quesos: El queso es otro ejemplo clásico de un alimento salado. La sal es crucial en el proceso de elaboración del queso, no solo para sazonarlo, sino también para controlar el crecimiento de bacterias. Algunos quesos, como el feta, el roquefort o el parmesano, tienen un sabor particularmente salado debido a su preparación y maduración.
4. Mariscos y pescados salados: El pescado, especialmente el salmón, la sardina y el bacalao, a menudo se conserva mediante salazón. Los mariscos como los camarones o las almejas también pueden ser secados y salados para conservarlos, lo que les da un sabor concentrado y salino.
5. Verduras en conserva: Algunas verduras como los pepinillos, las aceitunas, el alcaparra o los vegetales encurtidos suelen prepararse con una gran cantidad de sal, tanto para conservarlos como para intensificar su sabor.